Soy mamá de 5 hijos (4 hombres y 1 mujer). Y los 3 hijos menores han sido diagnosticados con Trastorno del Espectro de Autismo (TEA).
Hacer frente a un diagnóstico sobre una discapacidad no es fácil.
Lo inesperado y desconocido es obiamente dificil de aceptar, tal vez por esta razón el aceptar el diagnóstico de autismo podría tomarse más tiempo de lo que pensamos.
Como madre, el aceptar el diagnóstico de mis hijos me tomó bastante tiempo, me sentía culpable por no haberles dado suficientes terapias, o suficiente ayuda para que no estuvieran tan atrasados, comparándolos con chicos de su edad; los comparaba constantemente con otros niños. Esta clase de comparaciones me dañó porque no me permitía pensar positivamente. Quien sea que cuide de ellos necesita conocer sus abilidades y limitaciones, entender el diagnóstico y así encontrar los recursos que ellos necesitan.
Es de gran ayuda el que los padres pertenezcamos a un grupo de apoyo, nos ayuda a conocer otras personas con la misma situación y a compartir ideas; es alentador hablar el mismo lenguaje.
Todo esto es necesario para asimilar y aceptar el diagnóstico de TEA, sólo entonces, es que podemos enfocarnos en dar el cuidado y apoyo a una persona con autismo en forma positiva; cuando nuestros hijos con TEA perciben esta actitud positiva hacia ellos(as), les estamos ayudando al máximo, es como una de las mejores terapias que podemos darles.
El proceso de aceptación se debe en gran parte a nuestras actitudes y a la gente que nos rodea; aun cuando nuestros recursos sean limitados, el estar conscientes, entender el diagnóstico y contar con personas que nos apoyen, hace que nuestras actitudes sean positivas para hacer este trabajo; dejamos de compararlos y nos enfocamos en sus abilidades y no en sus limitaciones.
Una vez que los hemos aceptado como son, hemos hecho un gran avance, esto es; comenzamos a disfrutar de cuidar a nuestros hijos e hijas. Teresa Campos